
En términos directos, Luigi Cabrini, presidente del Consejo Global de Turismo Sostenible (GTSC) explica que el turismo no se mide por el número de llegadas de turistas internacionales, sino por la calidad del turismo de los destinos.
En plática con Sustentur, el también Consejero del secretario general de la Organización Mundial del Turismo (OMT), reconoció los esfuerzos de empresas turísticas y hoteles en el cumplimiento de 41 indicadores de sustentabilidad, acciones que permitieron a Riviera Maya formar parte del selecto grupo de 14 destinos en adoptar estas prácticas.
-¿Qué beneficio trae al estado la inclusión de Riviera Maya en los 14 destinos que integran el GTSC?
-En principio da un mensaje muy positivo hacia el mundo. Creo que existe un gran potencial para construir una imagen fuerte de Quintana Roo, porque por parte de los turistas creo que aún no hay una percepción de un concepto integrado de estado. Quintana Roo tiene un gran capital natural, un gran capital de costa, una capacidad hotelera extraordinaria, entonces una iniciativa como la de Riviera Maya pone a la región en el mapa mundial. El valor de este hecho crea un antecedente y motiva a otras compañías a seguir el ejemplo.
-¿Cómo se puede medir en términos de marketing una certificación ambiental?
-Hemos hecho varios estudios sobre el efecto de mercado que tiene una certificación o un producto verde, y todos apuntan a que efectivamente hay un mejor posicionamiento. En segundo lugar, hay clientes dispuestos a pagar algo más para una compañía o en un destino o un producto verde, es una tendencia claramente en expansión, de hecho desde el Consejo vemos ese plus de marketing que tiene el certificarse como un incentivo importante, y es justo que sea así. Se puede ser sostenible en hoteles de 500 habitaciones y no solo en hoteles ecológicos.
–Es común escuchar a empresarios decir que cuidar el medio ambiente es cuidar el bolsillo. ¿Qué opina al respecto?
-No está dicho de una forma muy elegante, pero al final creo que tienen razón, porque hay que reconocer que un empresario tiene que hacer negocio, en realidad no hay conflicto en este tema, al contrario, el mantener los recursos naturales, mejora un producto y un producto de más calidad tiene un mayor valor. Otra consideración importante en la inversión es por ejemplo mejorar el balance energético de un hotel, hemos calculado que en dos años hay retorno de inversión y a partir del tercer año son ganancias netas, no hablamos de inversiones de largo plazo. Lo que hay que decir es que el término mismo de sostenibilidad es un poco abusado, por eso hay que traducirlo en términos más simples ¿qué quiere decir?, ¿cuidado del medio ambiente?, ¿cuidado de las personas?, el mensaje llega más claros cuando se traduce en términos más claros.
-¿Cómo es el comportamiento de los destinos a la hora de cumplir con los indicadores de sustentabilidad?
Los indicadores del Consejo son 41 divididos en cuatro grupos: gestión de la sostenibilidad, social, económico, cultural y medio ambiental. Por la experiencia que hemos tenido mucho depende de la experiencia de destino. Por ejemplo, en los destinos de playa, normalmente existe alguna deficiencia en manejo de agua porque hay más vulnerabilidad. En otros quizá la deficiencia sea el empleo local, mucho depende de la tipología del destino y algunos por sus propias naturaleza sin más fuertes en unos y otros.
-¿Qué casos de éxito destacan en la Riviera Maya?
-Me parecen importante algunas iniciativas como las que se realizan en el hotel Mayakoba como apoyo a las comunidades para la recuperación del cultivo de miel tradicional. También hay otros casos que actualmente están iniciando. El año pasado hubo un ejercicio con técnicos de la GSTC que han hecho esta evaluación en las que hay cosas positivas y otras que hay que mejorar, pero en general la radiografía ha sido positiva.
-¿Hacia dónde va México en términos de sustentabilidad?
-México tiene una potencialidad de recursos turísticos enormes. Es uno de los países que ofrece todo el producto que uno puede esperar, playas, cultura, gastronomía, zonas arqueológicas, pero no necesariamente hay que medir el turismo en llegadas internacionales, también en desarrollo social, en entradas financieras, en la calidad del turismo. Yo creo que el gobierno de México tiene un discurso muy claro que sobre el turismo y sus aspectos sociales, es decir hay un mensaje claro de querer hacer un instrumento de riqueza local porque hay que recordar que la sostenibilidad no es solo medioambiental, sino social.
-¿Quién debe impulsar la sustentabilidad? ¿Gobierno o empresa privada?
-En temas de sostenibilidad en México y en todos los países debe haber roles bien definidos. Los gobiernos en mi opinión tienen que crear un cuadro legislativo apropiado, tienen que dar incentivos y crear facilidades, pero las acciones concretas pertenecen a los destinos y a las empresas, un gobierno no tiene responsabilidad directa normalmente en el desarrollo de la empresa turística, tiene por supuesto que apoyar e incentivar, pero el protagonista es el pequeño y gran empresario, y la comunidad local.
-¿Qué programas apoyan a consolidar un turismo sustentable?
Hemos desarrollado un programa en la OMT que se llama Turismo Sostenible para la Erradicación de la Pobreza y hemos tenido 120 proyectos, 30 en América Central con un gran éxito, que dan buen ejemplo y pueden ser aplicados a nivel nacional en cada país.
-¿Qué tendencias están cambiando la forma de hacer turismo alrededor del mundo?
-Uno de los aspectos más destacados es el uso de las tecnologías. Siempre más gente recaba información y compra en internet. Segundo, la importancia de las redes para difundir las experiencias, estas características impulsan el crecimiento.
-¿Cuánto se calcula que crecerá el turismo en los próximos años?
-Desde la OMT prevemos que 1,800 millones de turistas internaciones en 2030. El año pasado hubo casi mil 80 millones y el crecimiento sigue entre 3 y 4% es decir muy fuerte anual y superior a otros sectores económicos.