Un borrador de decisión del Comité de Patrimonio Mundial publicado por la UNESCO advierte que las amenazas significativas a la Gran Barrera de Coral continúan presentes y llama a Australia a reportar su progreso en los próximos 18 meses.
Aunque la decisión del Comité reconoce las recientes promesas de Australia para proteger la Gran Barrera de Coral, afirma, el país debe “instrumentar rigurosamente todos sus compromisos”. “Este borrador de decisión mantendrá la presión sobre el gobierno para convertir sus compromisos en acciones y resultados reales”, dijo Dermot O’Gorman, director general de WWF-Australia.
Los informes oficiales de las autoridades de ese país dicen que la salud general del arrecife es pobre y está en deterioro. Este Patrimonio de la Humanidad ha perdido más de la mitad de su cobertura de coral en los últimos 30 años, y las poblaciones de animales como delfines, manatíes y tiburones están disminuyendo. Además de ser uno de los hábitats marinos más ricos del mundo, el arrecife genera cerca de US$5,8 miles de millones cada año y provee 69 mil empleos.
Las propuestas para expandir los megapuertos a lo largo de la costa han originado nuevas amenazas para el arrecife, con el dragado y el vertido de escombros y el incremento del tráfico de embarcaciones. Los planes para prohibir el vertido de escombros en sus aguas han progresado hasta el nivel federal y estatal, pero no han entrado en vigencia. El año pasado, el Comité de Patrimonio Mundial expresó sus preocupaciones sobre la industrialización del área y dijo que si no se realizan mejoras significativas, el arrecife podría ser incluido en la Lista de Patrimonio Mundial en Peligro.
Los 21 países miembros del Comité de Patrimonio Mundial de la UNESCO se reunirán el próximo mes en Bonn, Alemania, para debatir el estatus de la Gran Barrera de Coral y otros extraordinarios sitios naturales. Más de 350 mil personas de todo el mundo se han unido a la campaña de WWF en un llamado a los líderes mundiales para defender el arrecife de la destrucción industrial.
“La UNESCO ha tomado la decisión correcta. El futuro del estatus de Patrimonio de la Humanidad del arrecife debería ser determinado por la condición actual de sus valiosos corales y vida marina, según lo evaluado por los científicos”, señaló O’Gorman. (Vía: wwf.org)
